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martes, 21 de febrero de 2023

Tipo de harina para cocinar mejor

Existe una clasificación de la harina obtenida del trigo que responde principalmente a la diferencia en su contenido de minerales y usos. Las categorías son: cuatro ceros (0000), tres ceros (000), dos ceros (00), cero (0) y también medio cero (medio 0).

Diferencia entre harina 000 y harina 0000

La forma más rápida para conocer la fuerza de una harina es leer la etiqueta en donde dice la información nutricional del producto. Aquí encontraremos el porcentaje de proteína que tiene una harina. Cuento mayor porcentaje de proteína tiene la harina, mayor fuerza ofrecerá.

En referencia a su contenido de minerales, la harina de 000 tiene mayor contenido que la harina 0000. Los minerales se concentran en la cáscara del trigo. Cuando más ceros tiene una harina, más refinada es.

Harina 000: es más oscura, tiene más fibra, gluten y proteínas. Es más fuerte y presenta más puntos negros que una harina 0000.

Harina 0000: es más clara, tiene menos gluten y es la más refinada. Se emplea para pastelería, repostería y pastas.

 

Clasificación de tipos de harina

Los ceros determinan el grado de pureza de la harina.

Las harinas 0 contienen más impurezas y posibles restos de grano. Al ser menos refinadas, se emplean para elaboraciones más espesas.

Las harinas 00 y 000 poseen un alto contenido de proteínas que facilita a la formación del gluten. Para la elaboración de panes se logra conseguir un buen leudado.

La harina 0000 es la más refinada y la más blanca. Como tiene poca formación de gluten, no es recomendada para cocinar panes ya que pierden su forma.  Es por eso que se emplea en pastelería, elaboración de hojaldres y masas que son más ligeras.

Harina 0 =  Gran fuerza

Harina 00 =  Media fuerza

Harina 000 = Harina liviana

Harina 0000 = Harina muy liviana

miércoles, 15 de agosto de 2012

Camarones a la parrilla | Receta fácil

El éxito de un menú frío depende tanto de la variedad como de la calidad de las comidas. El menú frío con camarones es la mejor alternativa para atender a muchos invitados sin realizar grandes esfuerzos.

Además, no será necesario un lugar para cada uno en la mesa, ni tampoco que ésta responda a una forma determinada de presentación. La improvisación es parte del encanto informal que siempre tiene un menú autoservicio.

La presentación del menú es también importante: se puede lograr una decoración exitosa utilizando flores, canastitas de frutas y arreglos de verduras que han de comerse crudas (apio, rábano colorado, tomates, zanahorias, etc.). Los platos de melanina en colores resultan elementos ideales para utilizar en este tipo de reuniones.

Los mariscos son ricos en minerales y en proteínas: con sus frescos sabores y diferentes texturas son una deliciosa contribución a la cocina baja en grasas. Sin embargo, es importante recordar que son alimentos ricos en colesterol, por lo que se recomienda que su consumo sea moderado.


Cómo preparar camarones a la parrilla con aderezo de manzana

Preparación: 30 minutos
Cocción: 4 minutos
Raciones: 4

Ingredientes
camarones grandes crudos, sin cabeza: 600 gr.
Aceite de oliva: 1 cucharada
Sal y pimienta negra (a gusto)

Para el aderezo
Jugo de limón: 1 cucharada
Jugo de manzana: 2 cucharadas
Puré de manzana: 5 cucharadas
½ diente de ajo, machacado
1 cucharada de aceite de oliva extra virgen
Para decorar: cebollines frescos

Pasos para preparar camarones a la parrilla

Paso 1
Pelar los camarones y dejarles la cola. Con un cuchillo filoso, cortarlos por el dorso y quitarles el hilo negro. Enjuagar los camarones y secarlos con toallas de papel.

Paso 2
Revolver los ingredientes del aderezo; si desea, agregar más jugo de limón.

Paso 3 
Calentar una sartén o una parrilla para asar a fuego moderado; incorporar los camarones, cubrirlos con el aceite de oliva y sazonar con sal y pimienta a gusto. Asarlos durante  2 minutos por cada lado o hasta que estén rosas y opacos.

Paso 4
Distribuir los camarones en cuatro platos, cubrirlos con el aderezo de manzana y adornarlos con cebollines. Servirlos calientes o a temperatura ambiente.

Variación: si te gusta, podés asarlos en brochetas en la parrilla del horno.

Sugerencias: acompañar con arroz cocido o con papas al vapor junto a un buen vino blanco y suave.

Este plato es ideal como entrada a la hora de la comida.

¡Bon appetit!

jueves, 1 de marzo de 2012

Bajar de peso comiendo: la dieta disociada

Para aquellos que están cansados de probar dietas que lo único que hacen es producir el famoso efecto "rebote" posterior, en la actualidad puedes bajar de peso sin tener que "matarte" de hambre y comiendo un poco de todo. Recuerda que siempre existen dietas variadas que prometen soluciones mágicas para bajar de peso en pocas semanas y que, en realidad, no son efectivas a largo plazo.

Algunas personas que sufren sobrepeso u obesidad, suelen sentir la necesidad de bajar lo antes posible sus kilos de más, sin evaluar qué hábitos son los correctos para poder adelgazar sin dejar de alimentarse bien. Aquellas dietas que son extremadamente rigurosas en cuanto a la variedad y la cantidad de lo permitido, pueden resultar muy efectivas para bajar rápidamente de peso, pero sus costos pueden ser altos en referencia a sus resultados en el tiempo.

Lo que no debemos hacer

El efecto rebote es común cuando la persona llega a su peso ideal y retoma sus viejos hábitos desordenados, volviendo al sobrepeso inicial e inclusive, a uno mayor. Es común que una persona habituada a comer holgadamente, cuando comienza una dieta estricta, sienta que tiene hambre todo el tiempo. Tener que estar pensando y midiendo aquello que está permitido, cuántas calorías aportan y si se ha ingerido la cantidad apropiada al final del día, puede resultar incluso estresante.

Tampoco aquellas dietas acompañadas de laxantes, diuréticos, anfetaminas y similares han demostrado ser exitosas a largo tiempo. Ellos pueden también alterar el carácter y el estado anímico. Por este motivo, es importante bajar la ansiedad con el tema del tiempo que puede llevar lograr el peso ideal y armarse de paciencia para poder adelgazar paulatinamente, alimentándonos bien y quedando satisfechos.

Hace ya unos años ha surgido un nuevo concepto para bajar de peso y mantenerlo en el tiempo denominado "dieta disociada". Su nombre hace referencia a "disociar" la comida en dos categorías: las compuestas por hidratos de carbono y aquellas que pertenecen a las proteínas. Esta forma de alimentación se basa en mantener una alimentación variada, sin poner límites en las cantidades siempre y cuando se respete una premisa fundamental: no mezclar los hidratos de carbono con las proteínas.

Ello se debe a que el proceso de digestión, absorción y eliminación es mucho mejor, reduciendo considerablemente la formación de grasas en el cuerpo. Otro punto importante es la distribución de la comida durante todo el día. No es cuestión de no comer o comer pocas veces al día, sino de comer pequeñas cantidades o ingerir infusiones, varias veces al día.

Cómo comer

Antes que nada, para bajar de peso habrá que conocer cuáles son los alimentos que pertenecen a la categoría de hidratos de carbono y cuáles los que son proteicos. Ingerir al menos 2 litros de agua por día ayudará de gran manera, además de colaborar para la desintoxicación del organismo. La bebida no debe mezclarse con las comidas, deberá tomarse cada vaso de agua en los tiempos libres de ingesta de sólidos con un intervalo de media hora.

El desayuno o la merienda
- Un zumo de naranja o pomelo (dejar pasar media hora).
- Ingerir una porción de queso o un yogurt desnatado.
- Un café con leche.

El almuerzo
Una comida compuesta por el consumo a voluntad de pan, arroz, legumbres, pastas, farináceos, excluyendo totalmente aquellos que son hiperproteicos.

La cena
Lo contrario al almuerzo: una dieta hiperproteica que puede estar compuesta por: huevos, pescados, carnes, leche y quesos, estando prohibidos los hidratos de carbono.

Frutas
Se podrá consumir la cantidad de frutas deseadas y las veces que quiera, siempre fuera de hora y solas. Es recomendable mantener este orden y no al revés. Una cena hiperglucémica puede perjudicar la funcionalidad hepática y aumentar los valores de colesterol, como también dificultar el sueño nocturno y despertarse con molestias matutinas tales como cefalea, boca pastosa o mal aliento.

Dicha dieta ofrece resultados satisfactorios, tanto para aquellos que deseen mantener su peso como para aquellos que han fracasado con otras dietas. Se puede lograr bajar de peso alrededor de 3kg. al mes, dependerá también de cada organismo y el exceso de kilos.

Alimentos que no pueden mezclarse en la dieta disociada

La carne y el pescado nunca con el arroz, ni la leche ni la fruta.
La pasta solo se pude mezclar con verduras: champiñones, ajo, aceite y hierbas.
El arroz solo con verduras. Se permite una vez por semana, con pollo o paella.
La fruta ácida con las dulces. Tener cuidado con las ensaladas de fruta.

Cantidades recomendadas

Legumbres: 1 vez por semana, se puede acompañar a las lentejas por ejemplo con verduras y pollo.
Verduras: se pueden consumir prácticamente todas y mezclarlas con casi todo excepto con las frutas.
Huevos: no más de media docena por semana.
Lácteos: todos desnatados y naturales.
Quesos y pescados: todos.
Carnes: pollo y pavo a gusto. Cordero y conejo, una vez por semana.
Aceite de oliva y vinagre de manzana para condimentar. Mayonesa light.

Algunos alimentos prohibidos: los fritos, el pan blanco (únicamente integral si es necesario), los frutos secos, las patatas, el cerdo, los azúcares, los plátanos, los higos y el alcohol.

Platos permitidos y sabrosos:
Arroz con pollo, paella, spaguetti con pisto, caldereta de cordero, pulpo a la gallega, acelgas rehogadas con jamón serrano, revuelto de calabacines, pescado a la plancha con verduras, entre otros.